¿Es posible cero Covid?
Desde sectores académicos y políticos se ha iniciado un debate sobre la viabilidad en nuestro país de medidas, que más que mitigar los efectos del Covid-19, apunten a erradicar los contagios. La respuesta es que sí es posible, ya que hay países que están cerca de lograr escenarios libres de Covid.
Intentar erradicarlo es un deber ético, ya que la pandemia con toda su estela de dolor, muerte y perjuicio económico, podría seguir dañando por mucho tiempo más, debido a la lentitud con que se está vacunando en muchos países y a la aparición de nuevas variantes. Ante el enorme impacto personal, familiar y social que la pandemia está y seguirá generando, es clave desarrollar condiciones que abrevien esta situación.
La estrategia para ello es conocida y sólo posible si todos los actores, gobierno, políticos, empresarios y ciudadanía, concuerdan actuar decidida y conjuntamente en varios ámbitos de manera simultánea e interdependiente, superponiendo medidas sinérgicas -usando el reciente ejemplo de Espacio Público- como “los agujeros de un queso suizo”. Las principales son: medidas suficientes y oportunas de protección económica y social, que al asegurar el sustento eviten desplazamientos y den efectividad a las cuarentenas; disponer de pruebas rápidas y alcanzar máximos niveles de trazabilidad y aislamiento temprano; apoyar a la atención primaria, a las propuestas locales y el involucramiento comunitario, que contribuyan a comunicar el riesgo y a desarrollar prácticas con sentido de bien común; mantener un estricto control sanitario de nuestras fronteras, y promover la vacunación en nuestro país y el acceso universal a ellas en todos los países.
Solo así, como se ha señalado “podremos honrar a quienes han fallecido, agradecer a quienes han estado en la primera línea y recuperar nuestra tranquilidad emocional, física, familiar y laboral”. Entre todos, sí es posible materializar una esperanza de estar libres de Covid. Quizás eso, el actuar conjuntamente, es lo más difícil para nosotros ahora dados los múltiples intereses en juego y la polarización política y desconfianzas existentes. No superar ello, nos seguirá costando mucho dolor. Justamente por eso, se hace más urgente apoyar toda iniciativa que vaya en línea de generar acuerdos que nos permitan la efectiva erradicación del virus.
Osvaldo Artaza, Decano Facultad de Salud y Ciencias Sociales Universidad de Las Américas