Mujer que figuraba como fallecida pudo volver a sacar cédula de identidad
Ana Rosa López Duarte descubrió en el año 2006, cuando fue a renovar su cédula de identidad que aparecía como fallecida, estando desde entonces intentando revertir esta situación, que la tenía sin poder acceder a jubilación, salud, beneficios sociales, entre otras problemáticas.
Este viernes y gracias a las gestiones que se realizaron en conjunto con la Delegación Presidencial Provincial de San Antonio, la señora Ana llegó hasta las oficinas del Registro Civil para realizar el trámite y sacar su carnet de identidad, algo tan sencillo para muchos, pero imposible para ella en los últimos años, debido a que apareció en el registro como fallecida.
Según relata la afectada, en el año 1969 se encontraba viviendo en la región metropolitana, casada con un hombre que la maltrataba; por lo cual, decidió dejarlo e irse de la ciudad para que este no la encontrara. Lo que ella no tenía pensado, es que el sujeto interpondría una denuncia por presunta desgracia, que años más tarde resultó en que fuera dada por muerta.
Desde que la familia descubrió esta situación en el año 2006, debido a que Ana López Duarte necesitaba renovar su cédula de identidad, comenzó a buscar opciones, tocar puertas y recurrir a diversas entidades para revertir esta situación, algo que fue imposible hasta el año 2019, cuando tras llegar a la entonces Gobernación Provincial, se iniciaron los trámites para comprobar que efectivamente ella está viva.
“Cuando venció mi carnet vine a sacar el nuevo y ahí me dijo la señorita que aparecía por muerta. Para mí fue un golpe muy grande, golpeamos tantas puertas, en ninguna parte las abrieron, yo estaba desesperada con esto, no sabía qué hacer. Del Registro Civil nunca me dijeron que tenía que hacer, nada. Esto ha sido terrible, ha sido un sufrimiento muy grande, últimamente los médicos no me querían atender, sufrí una parálisis facial, mi hija trabajaba en el hospital y conociendo mi tema me atendieron”, relató Ana López.
Ahora con su carnet en mano, la mujer se mostró emocionada por lograr al fin poder oficialmente volver a vivir, “estoy contenta, volví a la vida después de todo lo que pasó”.
Asimismo, López agradeció especialmente las gestiones del funcionario de la ahora Delegación Provincial, Marco Torrejón, quien estuvo apoyando todo el proceso e incluso la acompañó este viernes.
El mismo funcionario, quien es encargado de Seguridad Pública de la provincia, explicó que, “llegó una persona a decirme el caso de la señora Ana y hablé inmediatamente con la delegada provincial para ver el problema que ella tenía, ya que llevaba 23 años fallecida, pero estaba viva. Con abogados de la Corporación aquí en San Antonio y lo más complicado de este caso era que el Tribunal era de Santiago (que dio la resolución del fallecimiento). Así se empezaron a hacer las gestiones, que empezamos en 2019, con la señora Ana, su hija, luchamos, luchamos y ahora ya estamos sacando su carnet y puede retomar su vida, porque ella sufrió harto. No ha podido recibir beneficios del Estado, no ha podido recibir su jubilación, que con mucho esfuerzo ella se ganó y aquí estamos a retomar su vida y a esperar a hacer el resto de trámites”.
Según explicó Marco Torrejón el trámite en el Juzgado Civil requiere de tiempo para llevarlo a cabo, sumando además el estallido social y la pandemia, “era muy complicado porque todo se hacia vía zoom. De hecho la última audiencia que tuvimos también se hizo vía zoom en la Delegación Provincial. La delegada provincial, junto al seremi de Justicia nos ayudo mucho también para que se pudiera apurar el tema en Santiago y a esperar que esto no vuelva a suceder, porque es muy lamentable, porque la señora Ana sufrió mucho”.
Paola Contreras, hija de la señora Ana, quien la acompañó en este proceso, también habló sobre la importancia de poder “volver a la vida” a su madre, “nosotros golpeamos muchas puertas, gasté plata en abogados, que nos exprimieron el poco dinero que teníamos. Fue todo muy complicado, para demostrar que estaba viva lo primero que nos pidieron fueron las huellas dactilares, el certificado de defunción, de nacimiento y de nacionalidad. Gracias a Dios Marco estaba con nosotros cuando vinimos a sacar las segundas huellas dactilares que nos pidieron y de ahí empezó todo el tramite y ahora felices”.