Experto apunta a la falta de comunicación como arista clave en baja confianza en la Convención Constituyente

Por su parte, Nicolás Freire, politólogo y académico Usach, se refirió al rechazo contra el segundo gobierno de Sebastián Piñera.
El pasado domingo se publicó una nueva edición de la Encuesta Plaza Pública de Cadem, en donde se refleja que la confianza en la Convención Constituyente cayó 9 puntos porcentuales, llegando a un 50%. De todas formas, supera al Gobierno (31%), el Congreso (26%) y los Tribunales de Justicia (24%).
Nicolás Freire, politólogo y académico de la Usach, explicó los motivos detrás de estos resultados. “Son dos situaciones que se retroalimentan, por una parte, la convención ha tenido problemas internos relevantes. El primero tiene que ver con la dificultad de saber comunicar sus procesos, algo que se ha reflejado desde el día 1. No han sabido o no han querido comunicar con eficacia el trabajo constituyente que están llevando a cabo. Ha quedado demostrado con hitos específicos, lo han reconocido y ha sido su talón de Aquiles”.
“El segundo elemento es que al no saber comunicar se termina visibilizando los problemas más que las virtudes, donde se comunica lo feo antes que lo bueno. Ha sido golpeada por diversas situaciones, desde los sectores más extremos de derecha o algunos como la Lista del Pueblo con comportamientos que no han resultado en un buen trabajo constituyente. Eso termina por afectar la imagen de la institución”, sostuvo.
No obstante, también cree que hay un tercer factor, uno externo. “No depende de ellos, sino de los medios de comunicación, y es que estos no han ayudado a comunicar los aspectos positivos y varios apuntan que se ha instalado un plan mediático negativo. No sé si eso existe, pero sí una atención especial al hecho noticioso negativo”.
Finalmente, mostró mesura. “De todas maneras, sigue siendo el espacio público con mayor confianza por parte de la ciudadanía, lo que significa que no se pierden las esperanzas en la nueva Constitución. Más bien existe una inflexión con respecto al trabajo que se ha llevado adelante y no contra el objetivo que se persigue”.
Segundo gobierno de Piñera
También fue evaluado en esta Cadem el segundo gobierno de Sebastián Piñera, que gracias a su 51% de malo o muy malo y solo un 14% de aprobación, se transformó en el peor evaluado desde el regreso a la Democracia.
“Y si nos tenemos que ceñir a los niveles de aprobación o rechazo, hay que señalar enfáticamente que es el peor gobierno de la historia. No se trata de una afirmación en términos subjetivos, sino en base a los niveles de aprobación e índices de rechazo que son muy altos”, afirmó.
Finalmente, dijo que ahora el gran desafío para la convención es dedicarle espacio a la discusión que permita en el futuro revocar a un gobierno como ocurre en otras latitudes.