Menos palabras, más obras

Con entusiasmo recibimos las palabras del Presidente Gabriel Boric el pasado 1 de junio, cuando, en su primera Cuenta Pública, anunció el mejoramiento del financiamiento asociado a las modalidades de educación especial. El discurso fue en la línea de su programa, donde este punto está incluido.
Fue una frase que celebramos con alegría, con la misma que pretendíamos festejar este 30 de junio los 75 años del Colegio Santa Lucía, que atiende a 74 niños y niñas con discapacidad visual. Sin embargo, la ilusión dista mucho de la realidad.
Para entender el contexto, la formación de cada uno de nuestros alumnos cuesta alrededor de 800 mil pesos mensuales. En la actualidad, la subvención no alcanza ni para cubrir la mitad de ese monto.
Por eso, basados en la promesa presidencial, asistimos con optimismo a reuniones con funcionarios de gobierno, para interiorizarnos al respecto. Dada la disminución de socios, la continuidad del establecimiento requiere de una “mano” del Estado.
No obstante, lo único que recibimos fue un portazo en la cara, como viene siendo la tónica con las distintas administraciones. Sin siquiera abrirnos una ventana de esperanza, nos avisaron que no habrá ningún aumento en los dineros.
Quedamos “plop”. Claro, esperábamos que al menos se analizara la opción, debido a lo anunciado por el Primer Mandatario.
Con este escenario, la sostenibilidad a largo plazo de nuestra escuela, como tantas otras especiales que están en igual situación, resulta imposible, pues la baja de los aportantes nos impide disponer de recursos frescos, teniendo en cuenta los gastos de Fundación Luz, nuestro organismo matriz. Si no hay cambios, el panorama asoma oscuro.
A futuro, si no nos queda otra que bajar la cortina, la alternativa que nos dieron es reubicar a los estudiantes en los colegios públicos cercanos y que se atengan a los Programas de Integración Escolar (PIES). El problema es que no existe obligación legal de incorporar este plan en los establecimientos, por lo que hay comunas donde no hay ninguno para recibirlos.
Así, conmemoramos el 75° aniversario del Colegio Santa Lucía con la única seguridad de que podremos celebrar el 76° cumpleaños, pero sin la certeza de que habrá un 77° festejo en el 2024. Para que eso ocurra, necesitamos menos palabras y más obras.

Sofía Villavicencio, Directora Ejecutiva de Fundación Luz