El abuso no es un espectáculo Katherine Salosny

El libro de Katherine es una biografía que nos lleva a conocerla en profundidad,a través de sus principales vivencias. El texto está escrito en primera persona y tiene un vocabulario cotidiano, transformándolo en un texto cercano y personal, en algunos momentos creí que estaba leyendo su diario de vida y sentí que cometía una falta, peor aún, escuchaba su voz en cada una de las frases. Es que leer confesiones tan íntimas y saber que son reales y no parte de la fantasía como en las novelas es una sensación muy fuerte.

Katherine nos llevará a conocer sus años de infancia, con sus momentos felices, sus recuerdos familiares, pero también su sentimiento de abandono y soledad, incluso con episodios de pobreza y mucha necesidad. Luego, conoceremos su juventud con la presencia del padre que se irá transformando en un monstruo a medida que el relato avanza, al mismo tiempo empatizaremos con sus ganas de salir adelante. Al avanzar en la lectura, en su adultez recordaremos sus años de éxito, incluida su carrera en radio y televisión, sus relaciones, su búsqueda de patrones amorosos masculinos y lo más importante su proceso de psicoanálisis y sanación que durará años. De esta forma logra perdonar, perdonarse, encontrarse y aceptarse como la persona que es y no la que otros esperan que sea.

El libro por supuesto, si bien cuenta toda la vida de Kathy,gira en torno al tema central que es el padre abusador, pero tiene un hechogatillador: en el año 2005 se conoce públicamente que él estaba siendo acusado de abuso sexual contra una menor de 8 años de edad. Con este suceso y el ataque de la prensa, especialmente de la farándula, Katherine envía una carta pública a los medios de comunicación, el abuso no es un espectáculo (que más adelante se transformará en el título del libro), al mismo tiempo ella y su familia, específicamente su hermana Marisol, deben aceptar, confesar y declarar que ellas también fueron víctimas de este abusador, su propio padre.

Es imposible no sentirse identificada con alguna de estas historias, si no es la del abuso, será la del machismo, la desigualdad de trato y salario en el mundo laboral, el miedo a la pobreza, el abuso de poder… entre tantas otras. No es que quiera victimizar a las mujeres, pero ciertamente el camino es más difícil que el de los hombres, sobre todo cuando se quiere progresar y hacerse su propio camino. Sin embargo, con Kathy aprenderemos que es posible salir adelante, sanar, levantarse una y otra vez, brillar y sobre todo vivir en paz y feliz.

Gracias Katherine por el mensaje que nos dejas con este libro, El abuso no es un espectáculo.

Jessica Medina @queleo_algabarrobo