El futuro del litio en Chile

Se calcula que el litio aportó del orden del 2% del PIB de Chile, cerca del 7% de los ingresos del Fisco. En el Anuncio del presidente Boric del 20 de abril, hizo alusión a la política del Estado referente a la propiedad, explotación y comercialización del litio. Se propone que el Estado participe en todo el ciclo productivo de este mineral, creando para ello una Empresa Nacional del Litio, utilizando una alianza de colaboración público-privada. Este tema resulta ser el más importante de los anuncios.
La negociación entre el Estado y las empresas privadas interesadas es crucial para lograr los acuerdos, que permitan una evolución positiva del negocio. En este sentido, la alianza público – privada parece razonable, pero debe definirse cómo se logra esto.
En Salar de Atacama, la concesión de SQM expira en 2030 y la discusión que viene es si existirá una licitación o será el Estado quien cumpla directamente este rol de explotación y comercialización y cuál sería su actuar como socio, de continuar. Por su parte, la concesión de Albemarle expira en 2043. En 2018 se realizó esta negociación en la cual se estableció su cota de producción. La actual capacidad de producción de SQM es 180 mil toneladas y para 2024 llegará 210 mil toneladas. Su contrato establece una producción de 216 mil toneladas métricas anuales. La empresa, dado el límite que establece Chile, ha decidido expandir sus operaciones fuera de Chile: al 2025 espera producir 30 mil toneladas en China y 25 mil toneladas en Australia. Albemarle por su parte tiene una cuota de 80 mil toneladas métricas anuales y está cerca de alcanzar ese límite. Ambas empresas “arriendan” a CORFO el salar de Atacama. No se observa que en las condiciones actuales el Salar de Atacama pueda ampliar su producción si no se renegocian estas cuotas. Atacama es el único salar en Chile que podría marcar una diferencia para competir por el primer lugar con Australia.
En general, los cambios drásticos en los modelos industriales productivos suelen generar quiebres, dado que es posible que los nuevos sistemas de gestión y operación no alcancen condiciones adecuadas de producción por carecer de la experiencia necesaria para ello. Los modelos productivos requieren tiempo para asimilar las trasformaciones y el análisis de las decisiones y su adaptación.
En Chile existen opciones abiertas de exploración por nuevos recursos de Litio y la experiencia indica que la exploración minera, de un recurso en un territorio, tiene mayor probabilidad de éxito si diferentes actores con distintos conceptos, modelos y técnicas de exploración y explotación que participen de dicho desafío.
Esto último es un punto a favor para la opción de mantener en Chile un modelo público – privado, similar al del cobre, pero con condiciones específicas para la industria del Li, donde participen empresas privadas y estatales que cumplan adecuadamente con dichas condiciones, en la cual sigan participando instituciones como ENAMI, CORFO, CCHEN, SERNAGEOMIN y DGA entre otras, aportando conocimiento al análisis técnico – económico de este desafío. CODELCO tiene dentro de su misión y visión producir cobre, debiese ser otra empresa o entidad la que se involucre a temas de litio o solo ENAMI.

Andrés Soto Bubert, César Arredondo Peña,
Académicos Ingeniería Civil en Minas
Facultad de Ingeniería, Arquitectura y Diseño
Universidad San Sebastián