Vacaciones y problemas de salud en viajes largos: La importancia del autocuidado
Muchas personas ya se encuentran de vacaciones, o están a la espera de éstas para poder disfrutar de la mejor manera posible. Sin embargo, solemos olvidar o desconocer que existen diferentes factores o situaciones que necesitan del autocuidado para no poner en riesgo nuestra salud.
Los distintos destinos de vacaciones, muchas veces se encuentran a grandes distancias, ya sea movilizándonos por vía terrestre o aérea, sumado a que algunos de estos lugares además cuentan con un clima extremo. De acuerdo con lo anterior, el hecho de viajar largas distancias (más de 6 horas) puede provocar que, al estar en un reposo prolongado, el flujo de sangre en las extremidades inferiores disminuya, provocando que ciertos factores de la sangre se acumulen y generen un trombo o más conocido como coágulo, generando una trombosis venosa profunda (TVP), con mayor probabilidad en personas embarazadas, obesas, fumadoras, cardiópatas, usuarias de anticonceptivos orales y otros. Este coágulo obstruye el flujo sanguíneo causando daños a los tejidos subyacentes, o en órganos vitales como el corazón, pulmón o cerebro, con graves consecuencias de salud.
La inmovilidad o la posición en un viaje largo, también podría generar problemas músculo esqueléticos como el dolor lumbar, dolor causado en la parte baja de la espalda por pasar muchas horas en posición sentada, afectando principalmente al conductor quién, además, debe ir concentrado en la conducción en una postura tensa. Para el resto de los pasajeros se puede presentar dolor cervical producto de pasar muchas horas mirando pantallas móviles como celulares y tablets.
Independiente al tipo de transporte que se utilice para llegar al destino, además, debemos lidiar con distintos tipos de climas, teniendo que enfrentarlos con ayuda de aire acondicionado, climatizador o calefacción. Estos cambios de temperatura provocan que ciertos microorganismos se encuentren con un ambiente o condiciones favorables para ingresar a nuestro organismo y provocar molestias o alguna enfermedad.
Por todo lo anterior, se sugieren algunas medidas de autocuidado para disfrutar de sus vacaciones y prevenir estos problemas de salud.
Para la trombosis venosa profunda se recomienda uso de medias de compresión graduada, pararse del asiento o caminar al menos cada 2 horas, extender y flexionar las piernas, pies, tobillos y dedos durante el viaje y no usar ropa ajustada. Sobre el dolor lumbar se invita a caminar y estirarse en distintos momentos, antes de subir al vehículo, cada 60 a 90 minutos (deteniendo el auto) y al llegar a su destino. Respecto al dolor cervical, evite mirar pantallas por largo tiempo, al utilizarlas procurar que estas se encuentren al mismo nivel de nuestra cara y ojos (subir el brazo en vez de bajar la cabeza). Elongar la musculatura del cuello cada 2 a 3 horas. Para los resfriados por cambios bruscos de temperatura, se puede climatizar a una temperatura equilibrada su auto; además de usar ropa adecuada para el clima (calefaccionar de manera gradual).
Karen Caro Vallejos, académica de la Facultad de Enfermería, UNAB sede Viña del Mar