Probar un limón y tocar frutas se convierte en potente actividad pedagógica en jardín infantil de la JUNJI
La experiencia «Los Sentidos» está cambiando la manera en que los niños y niñas aprenden y se desarrollan a través de la estimulación sensorial
Sabores, aromas y texturas, la experiencia «Los Sentidos» llegó a revolucionar al jardín infantil «Trompito de 7 Colores» de Casablanca, ofreciendo a los niños y niñas del nivel de sala cuna mayor, la oportunidad de sumergirse en un mundo de exploración sensorial a través del juego y la experimentación. Esta iniciativa está diseñada para estimular el desarrollo cognitivo, emocional y social mediante la interacción con diversos alimentos e insumos que permiten a los párvulos explorar y descubrir a través del tacto, la vista, el olfato, el gusto y el movimiento.
Según las neurociencias, el aprendizaje sensorial es fundamental en el desarrollo temprano. La estimulación de los sentidos ayuda a crear y fortalecer las conexiones neuronales, esenciales para el desarrollo cognitivo, emocional y social de los niños y niñas. Estudios demuestran que las experiencias multisensoriales no solo enriquecen el aprendizaje, sino que también promueven el pensamiento lógico y estimulan la comunicación no verbal.
La educadora del jardín, María José Plaza destacó que «A través de ‘Los Sentidos’, hemos observado cómo los niños y niñas muestran una mayor disposición al aprendizaje y una notable mejora en sus habilidades de comunicación y concentración. Es una experiencia que despierta su curiosidad innata y les permite aprender de una manera natural y divertida».
Esta y otras muchas actividades innovadoras son promovidas por la Directora del recinto Viviana Back quien solicita a su equipo de profesionales exponer en cada reunión de equipo cuáles son las iniciativas transformadoras que invitan a los niños y niñas a ser protagonistas de sus aprendizajes.
La directora regional, Elizabeth Alarcón Rojas, indicó que «Esta iniciativa del jardín infantil ‘Trompito de Siete Colores’ es un claro ejemplo de cómo la educación puede estar centrada en el desarrollo integral de los párvulos. Al fomentar la exploración sensorial, estamos sentando las bases para un aprendizaje que perdurará toda la vida», precisó.
La actividad ha sido un rotundo éxito, con los párvulos degustando y explorando una amplia variedad de alimentos, como naranjas, limones, uvas, higos, galletas, membrillo, kiwi, frutilla, uva, mermelada casera, cada uno diseñado para estimular sus sentidos y enriquecer su experiencia de aprendizaje. Los resultados han sido extraordinarios, mostrando un notable incremento en la curiosidad y la participación activa de los niños y niñas.