Interponen querella contra inmobiliaria por fallas en viviendas de Villa El Trigal

Este viernes se presentó la acción legal por parte de un grupo de vecinos, acompañados del diputado Tomas Lagomarsino, por presunta estafa contra la Inmobiliaria Invica, debido a los desperfectos que han tenido las viviendas de Villa El Trigal después de ser entregadas.
Según explican los vecinos son principalmente filtraciones y problemas en las cañerías las que han afectado de sobre manera desde hace años, sin tener una respuesta de la empresa a cargo de este proyecto habitacional, quienes tampoco se han reunido para escuchar los problemas que tiene la comunidad.
Fabián Campos, vocero y creador del Comité Habitacional de la Villa El Trigal, etapas 1, 2 y 3, se refirió a la compleja situación que vive la gran mayoría de vecinos y vecinas de este sector debido a los problemas y desperfectos que se han presentado en sus casas.
“Esto es a partir del año 2022, 2023, las casas comenzaron a presentar filtraciones, fugas de agua, y no una, sino que varias fugas al mismo tiempo. Entonces empezaron a colapsar cuadras completas, etapas completas, y ahí nos vimos en la obligación de reunirnos, comenzar este comité, en donde decidimos enfrentar a la empresa, explicarles la situación, ver el tema de las garantías que ellos decían que estaban, hasta cierto punto vencidas. Pero nosotros llegamos al municipio, hicieron un informe técnico en el cual de 5 casas testeadas, 4 tenían daño estructural. Eso nos llevó a entender que nosotros estábamos dentro de la vigencia, en este caso de las garantías. Aún así la empresa nunca quiso acceder a reunirse con nosotros, más que una vez que lo hicimos en una reunión online, y simplemente no llegamos a nada. Ellos se comprometieron a ciertas cosas que no cumplieron, así que decidimos llevar esto a un tema judicial”, explicó el vecino.
Según lo expuesto, de más 200 casas que se encuentran en la Villa El Trigal, sería alrededor de 90% las que se han visto afectadas por estos problemas, los que además con el paso del tiempo se han ido agudizando en algunos domicilios.
Campos relató que, “algunos los solucionaron de manera particular, otros no quisieron inmiscuirse en temas legales. En estos momentos somos prácticamente 90 las casas que estamos en este proceso de querella. El problema que tienen las casas son las filtraciones, la humedad, la falta de materialidades, la mala construcción, como ventanas, puertas descuadradas, los desniveles, y el daño estructural que causó las mismas fugas. Hay que entender que cada casa presentaba nueve, ocho, diez, doce fugas, todas eran subterráneas la mayoría, afectando por debajo de la casa, lo que le da una inestabilidad, que en caso de un sismo, las casas perfectamente se podrían inclinar”.
Son daños millonarios los que han sufrido estos inmuebles, situación que además afecta al proyecto de vida de estos cientos de familias, quienes ilusionados recibieron sus casas hace algunos años, solo para encontrarse con tantos problemas.
Tal es el caso de Geraldina Soto, una de las vecinas que ha sufrido con filtraciones en su hogar, quien dijo que, “yo llegué el año 2017, fui la primera que llegué a la villa porque vivía en Bellavista, pasaron como dos años y tuve mi primera filtración, que fue atrás en el patio. Después fueron siguiendo, siguiendo, siguiendo y ya llevo 14 filtraciones. En una filtración se me quemó el calefón, estaba lloviendo y si no fuera por la lluvia, se me quema la casa. Uno piensa que al fin tengo mi casa, que rico, es algo mío. Pero aquí hay gastos, hay que pagar maestro para que arregle las cosas, reparar cosas, si salgo hay que dejar el agua cortada, volver, dar el agua. Y eso es un cansancio, económicamente, mentalmente. Para mí esto ha sido agotador, porque son años de sacrificio, trabajando, juntando la plata para tener mi casita, que esperaba que fuera lo más lindo. Pero verla toda destruida, en la cocina, el baño del segundo piso, las murallas llenas de humedad, es una pena”.
Por su parte, Augusto Herrera, vecino de la Villa El Trigal, fue otro de los que entregó su testimonio, señalando que, “tenemos niños chicos y tenemos que estar cortando y dando el agua para que se laven los dientes, para hacer su aseo o el cocinar, además implica un nervio el de hecho salir de la casa, no saber si tienes que cortar el agua, si está corriendo el medidor. Nosotros acumulamos 700.000 pesos de agua, magínense cuántos metros cúbicos tenemos debajo de la casa, agua que no se infiltra, se mantiene ahí. Toda esa humedad la hemos vivido y ha subido directamente a la casa, tenemos daño estructural evidente por la subida y esta agua que está bajo los cimientos. Nosotros, dentro de nuestro desconocimiento nuestra primera fuga la arreglamos nosotros por nuestra cuenta, porque no podíamos tener esa fuga corriendo y a la espera de que se hagan cargo o tener una respuesta. Nosotros ya optamos por tirar todas nuestras cañerías por fuera, que es la solución definitiva. Pero esa solución definitiva no es algo de mantenimiento de un hogar, fue un recambio total de las instalaciones, no fue un mantenimiento. Lamentablemente es una acumulación de cosas y de daños que se van sumando durante el tiempo. Lo mejor fue ya no seguir destruyendo tu casa, tu hogar, no seguir destruyendo los cimientos para poder encontrar una fuga”.
El diputado Tomas Lagomarsino estuvo acompañando a las personas afectadas, señalando que, “hace algunos meses atrás, los vecinos y vecinas de Villa El Trigal tocaron las puertas de nuestra diputación a fin de poder conocer en primer lugar, pero también apoyarles en un proceso que los ha tenido conmocionados y le ha perjudicado durante muchos años, porque ellos todos recibieron en el año 2017, lo cual era un sueño, un proyecto habitacional grande con apoyo del Estado y con visación del Estado, y que finalmente se transformaba en un dolor de cabeza, en una serie de problemas e inconvenientes que le ha ido afectando y perjudicando durante todos estos años. A partir de ello, desde que nos contacta-ron hace algunos meses, empezamos a desarrollar un proceso, en el cual fuimos recopilando los antecedentes, analizándolos, hasta que finalmente hoy interponemos la querella por presunta estafa, representando a 87 familias que se han visto perjudicadas, que tienen antecedentes y pruebas suficientes para demostrar que aquí ha habido una dejación por parte de la empresa, por la inmobiliaria Invica, y que podría considerarse y tipificarse dentro del delito de estafa eventualmente, y con ello acceder a una indemnización y las reparaciones que corresponden. Sobre todo tomando en cuenta que aquí no estamos hablando de una o dos casas, estamos hablando de cerca de un 90% de las viviendas entregadas, que tienen problemas de grifería, cuya garantía son 5 años, mientras que las estructurales son 10 años”.