CONMEMORACIÓN DIA DEL TRABAJO

Compañeras y compañeros, en vísperas de conmemorar el “Día Internacional del Trabajo”,
nuevamente lo hacemos viviendo un escenario de crisis sanitaria, y vemos con indignación y
preocupación que son una vez más, como a lo largo de la historia, las trabajadoras y los trabajadores quienes pagan el catastrófico costo de la crisis, hipotecando su salud para trabajar, y así sostener sus hogares y mantener a sus familias.
Vivimos tiempos difíciles, con una pandemia única en la historia, enfrentada bajo el alero de
un modelo capitalista, que pone por sobre las personas la ganancia y la utilidad, beneficiando con ello exclusivamente a los grandes empresarios, prueba de ello son las utilidades millonarias que el año de pandemia han percibido los denominados súper-ricos, entre ellos Sebastián Piñera. Un
modelo económico que profundiza las desigualdades, y domina sin contrapeso la economía mundial.
La sucesión de medidas improvisadas a las que nos ha sometido este agonizante gobierno,
se han visto materializadas en abruptos cambios, que no han hecho otra cosa que precarizar aún más las condiciones del empleo, ejemplo de esto, es la acelerada propuesta de “Modernización del
Empleo Público”, que no es más que el esfuerzo de las autoridades por privilegiar un modelo económico que exige, pero no protege, y que pone como eje central el crecimiento económico por sobre la salud y el buen vivir.
Por ello, rechazamos enérgicamente la actitud de las autoridades a nivel nacional, regional
y local, quienes en estos difíciles tiempos, han tomado decisiones erradas y alejadas de la realidad, mostrado soberbia y un nulo compromiso con las necesidades de las y los trabajadores. Hasta ahora no hemos observado ninguna acción que venga a reivindicar nuestras demandas sociales y
laborales, pero insisten en ejercer y validar liderazgos autoritarios e indolentes, sin capacidad de escucha y con nula empatía.
Solidarizamos con las y los compañeros que en estas nefastas circunstancias han visto
amenazados sus empleos a causa de malas y condenables prácticas de los directivos de nuestro hospital, y solidarizamos también con aquellos que han perdido sus empleos, porque entendemos que detrás de ellas y ellos, hay una familia que sufre y resiente estas injusticias.
En este escenario desolador hay una luz de esperanza, la unidad del pueblo, la cual
expresada en el estallido social nos entregó la posibilidad de construir una nueva constitución, que genere los cambios que permitan una nueva sociedad con justicia social y equidad, donde las trabajadoras y los trabajadores sean los actores principales y reciban lo que en justicia merecen.
Estamos conscientes de lo difícil que ha sido realizar la labor cuando nos enfrentamos a la
escasez de recursos en salud, lo que se suma al cansancio físico y mental. Queremos agradecer la vocación, compromiso y dedicación demostrada día a día por cada uno de ustedes. Son ustedes trabajadoras y trabajadores de la salud quienes permiten verdaderamente que el país se desarrolle,
pues sólo gracias a una buena salud, se puede crecer, estudiar y auto realizarse, solo cuando hay salud, se puede trabajar y llevar sustento al hogar.
Compañeras y compañeros, hoy más que nunca, los instamos a seguir luchando con unión y convicción por sus derechos, hasta que las trabajadoras y los trabajadores de la salud sean valorados y reconocidos, hasta que en Chile los recursos destinados a la salud pública sean suficientes y decentes, y hasta que cada trabajador y trabajadora pueda desempeñarse en condiciones seguras
y dignas.
¡Pan, Trabajo, Salud y Dignidad!
Directiva APRUS
Hospital Claudio Vicuña
San Antonio