Analista internacional: Petro y Boric se perfilan como pilares de las futuras instancias de integración latinoamericana
El académico de la Usach, Pablo Lacoste, consideró clave la propuesta de moneda común expresada por el Presidente del Congreso colombiano. “Es bueno tener el objetivo, la utopía, para ir avanzando gradualmente en esa dirección”, afirmó.
El primer día de Gustavo Petro como Presidente de Colombia, el primero de izquierda en ese país, estuvo marcado por una reunión bilateral con su homólogo chileno, Gabriel Boric. En la cita, el Mandatario colombiano habló de la reforma tributaria que pretende impulsar y de la propuesta de moneda común en Latinoamérica.
“Petro y Boric, junto con la inminente llegada a la presidencia de Lula en Brasil, se perfilan como los tres pilares de las futuras instancias de integración latinoamericana”, sostuvo el analista y doctor en estudios americanos de la Usach, Pablo Lacoste.
“En los últimos 30 años, mientras el mundo ha ido cambiando y avanzando en la formación de bloques regionales, y se ha consolidado plenamente la Unión Europea, en América Latina los intentos de integración han fracasado uno tras otro”, comentó.
Sin embargo, el académico del Instituto de Estudios Avanzados de la Universidad de Santiago considera que, con el arribo de Petro, existe la posibilidad cierta de formar un bloque que “se nutra de la experiencia de los errores cometidos en las instancias anteriores, como Mercosur, Alianza del Pacífico, Prosur y Unasur, y ponga en marcha algo estable que se pueda sostener en el tiempo, y que pueda crecer y madurar gradualmente”.
Moneda común
Para el analista, la propuesta realizada por el Presidente del Congreso colombiano, Roy Barreras, de adoptar una moneda común en América Latina es clave. “Traza un horizonte”, explicó.
“Ya en la década de 1960, durante la presidencia de Eduardo Frei Montalva, se estaba negociando ese tipo de innovación entre Chile y Argentina, donde estaba el presidente Arturo Illia, eso es difícil, porque eso exige coordinar la macroeconomía de todos los países, una disciplina fiscal muy rigurosa, tener un control de la inflación y generar un acuerdo general entre todas las políticas macroeconómicas. Sin eso, no se puede hacer una moneda común, pero es bueno tener el objetivo, tener la utopía, para ir avanzando gradualmente en esa dirección”, concluyó.