Seremi de la Mujer y Equidad de Género se refirió al primer año de implementación de la Ley Gabriela

La seremi de la Mujer y Equidad de Género de la región de Valparaíso, Valentina Stagno, conversó con Diario Proa en el marco del primer año de implementación de la Ley 21.212, la cual fue promulgada el 2 de marzo del 2020.
La ley, que ha sido denominada como Ley Gabriela en homenaje póstumo a Gabriela Alcaíno Donoso, quien fue asesinada junto a su madre, por su ex pololo, sanciona la violencia de género ejercida hacia las mujeres con tipos penales como el femicidio por causa de género, femicidio íntimo, entre otras agravantes, elevando con ello las penas que existían en la legislación, pudiendo condenar a los responsables de delitos contra las mujeres con penas desde el presidio mayor en su grado máximo a presidio perpetuo calificado, es decir de 15 años y un día a 40 años.
La seremi conversó con Diario Proa sobre la ley, su implementación y como se debe seguir trabajando desde su cartera, no solo para lograr sanciones contra quienes cometan actos de violencia contra las mujeres, sino que además desde la vereda de la prevención para evitarlos.
¿Cómo creen que ha sido este primer año de puesta en marcha de la ley, se ha cumplido con el objetivo de ser un paso importante para enfrentar la violencia contra las mujeres?
Erradicar todas las expresiones de violencia machista ha sido y es prioridad para nuestro Gobierno, si bien, hemos tenido significativos avances en prevención, sensibilización y sanción a los actos constitutivos de violencia de género y violencia intrafamiliar, es un trabajo que aún mantiene grandes desafíos. Uno de ellos es, precisamente, avanzar en urgentes proyectos de ley que construyen una nueva institucionalidad en prevención, abordaje y atención a mujeres sobrevivientes. En este sentido, sin lugar a duda, Ley Gabriela es una ley que sitúa jurídicamente hablando, la violencia de género y sus expresiones: femicidio por razón de género, femicidio íntimo, además de aumentar la sanción penal a agresores y femicididas, hecho que contribuye a reducir las barreras de impunidad.
¿Se ha visto un cambio tras contar con estas nuevas figuras penales al momento de aplicar sanciones por delitos contra las mujeres?
Efectivamente, desde la promulgación de la Ley Gabriela, todo asesinato de una mujer por razón de género es considerado femicidio, con penas de hasta 40 años de presidio.
¿Cree que se ha logrado crear consciencia respecto a esta nueva ley en la sociedad y como esta busca que la violencia contra la mujer no quede impune?
Esta Ley es tremendamente significativa en la reivindicación de derechos de las mujeres y, particularmente, consolidar nuestro derecho a vivir una vida libre de violencia, sin embargo, la sensibilización acerca de esta problemática es el gran desafío que urge abordar colectivamente, con compromiso y la profunda convicción que la violencia de género es un atentado gravísimo a los derechos fundamentales de todas.
¿Cómo se planifica trabajar este año en materia de prevención y atención a las mujeres que estén siendo víctima de violencia?
El trabajo que hacemos desde la cartera Mujer y la Equidad de Género tiene distintas expresiones orientadas al fortalecimiento de las autonomías física, política y económica de nosotras las mujeres a través de la implementación y ejecución de Políticas, Planes y Programas de Igualdad y Equidad de Género, considerando el enfoque territorial, y aportando al cambio cultural que se requiere para alcanzar una sociedad más igualitaria entre mujeres y hombres en el país. En el área de la autonomía física y el derecho de todas nosotras a vivir una vida libre de violencia trabajamos en prevención, atención integral a mujeres sobrevivientes de hechos de violencia y reeducación a hombres que ejercen violencia en contexto de pareja reconociendo así el carácter cultural, estructural y social que se ha perpetuado históricamente y es el continuo de violencia machista.
Durante estos meses de pandemia hemos implementado un plan de contingencia enfocado en la prevención, protección y promoción de las vías de atención presencial y remota hoy disponibles para mujeres que sean víctimas de VIF y/o violencia de género. Como Ministerio de la Mujer, sabemos que el confinamiento agudizó los episodios de violencia, y que muchas veces las mujeres no pueden solicitar ayuda al encontrarse 24/7 con el agresor, por lo que lanzamos canales silenciosos de ayuda y orientación para mujeres sobrevivientes de violencia de género o testigos.