TENS más antigua del Hospital cuenta cómo ha sido trabajar en pandemia
Mónica Alarcón Sepúlveda, técnico en enfermería de nivel superior, quienes celebraron el pasado 26 de marzo el Día del Tens; llegó al hospital Claudio Vicuña el 30 de abril de 1982, por lo cual está próxima a conmemorar 39 años de servicio ininterrumpido en el principal centro asistencial de la provincia de San Antonio, ya que desde que se decretó la alerta sanitaria por la pandemia del covid -19, siguió cumpliendo con sus turnos en Esterilización, unidad en la que se desempeña hace 30 años.
“La labor que realizamos es súper relevante, por lo cual es importante que como estamento más numeroso del hospital estemos unidos. En este momento hay que demostrar lo valiosos que somos y que siempre tenemos que estar capacitándonos para ser mejores funcionarios”, declaró la tens que se especializó en hemodiálisis y manejo de autoclaves.
La trabajadora que llegó al Claudio Vicuña cuando tenía 18 años, aseguró que nunca pensó dejar sus labores por miedo a enfermar, pero reconoció que “al principio, hace un año, sentía mucha incertidumbre. En el servicio lo que más temían mis compañeras era contagiar a su familia, pero con el conocimiento que fuimos adquiriendo, actualmente nos sentimos más seguras”.
Trayectoria
Mónica Alarcón, que se desempeña en Esterilización como operadora de autoclave, dispositivo diseñado para desinfectar herramientas quirúrgicas y dentales y otras utilizadas en atención de salud, obtuvo el título de tens en el año 2014, tras cursar nivelación de estudios en el Centro de Formación Técnica de la Universidad de Valparaíso.
“Antes de quedarme definitivamente en el Claudio Vicuña, tuve en breve paso haciendo un reemplazo en el Servicio de Pediatría y luego trabajé un año en la recién inaugurada Clínica San Antonio, tras lo cual volví a Medicina, donde estuve por casi una década, después me fui a la Unidad de Tratamiento Intermedio, que es lo que más me ha gustado, porque ahí se trabaja principalmente con adultos mayores. Esterilización es un mundo completamente diferente, ya que no tenemos contacto con pacientes, pero todo el funcionamiento del hospital depende de este servicio”, dijo la trabajadora.
Finalmente Mónica Alarcón aseguró sentirse parte de un gran equipo de trabajo, con un objetivo en común que es prevenir, recuperar y rehabilitar la salud de las personas y agregó que “cada uno de los funcionarios aportamos desde nuestras competencias para que ello suceda. Tengo la plena certeza que hay personas con gran vocación y sentido de entrega. Durante mi trayectoria he tenido la satisfacción de conocer grandes profesionales, nobles enfermeras y técnicos a las cuales debo mi formación”.