Entrevista a madre de una de las víctimas de abuso sexual de director de taller de teatro

Este martes se conoció el veredicto que declara culpable de abuso sexual al director del taller de teatro Talita Cum, Claudio Pontigo.
Al respecto conversamos con M. S., madre de una de las jóvenes afectadas
¿Cuándo ocurrieron los hechos y qué edad tenía su hija?
Mi hija tenía 15 años, la misma edad de las otras víctimas. Estos hechos ocurrieron en Francia y posteriormente en el taller de teatro, siempre con la excusa de pruebas de vestuario, mejorar personajes, siempre citando a solas a las víctimas. En Francia él ingresaba a la habitación y se metía en las camas, usando como excusa el apego y la confianza que podía entregar, se ganaba la confianza no solo de las niñas sino también de los apoderados, nunca dejaba que asistieran a los viajes o a los ensayos que hacía con las niñas. En ese marco él les decía que no le contaran muchas cosas a los papás, solo cuando tenía que hacer una actividad y solicitar dinero, ahí estaban los apoderados.
¿Dónde ocurrieron los abusos?
En el caso de mi hija fue abuso, cuando el se mete a la habitación, le empieza a tocar los senos, la vagina y decirle cosas al oído, mientras se masturba, la ropa interior que estaba usando se le queda en la cama y esa fue una de las pruebas que dieron las otras chicas, acordándose del color azul marino; Ya de vuelta en el taller de teatro obliga a mi hija a practicarle sexo oral. Esto ocurrió con una testigo que justo fue al taller y pensó que él estaba con otra mujer, nunca que era mi hija: Cuando la vio salir pensó que había una relación entre ambos; hasta el día de hoy nos pide perdón a mi y a mi hija por no haber hablado antes. A las otras menores prácticamente las mismas características, a una de las niñas la violó, ella le había comentado que le gustaban las mujeres, fue como una manera de decirle que supiera lo que era estar con un hombre
¿Por qué cree que demoró tanto el proceso?
El caso como que durmió un poco cuando estuvo a cargo del fiscal Mancilla, la PDI si se movilizó rápido ordenando diligencias como los peritos, conseguir pruebas. En el 2018 denuncian dos niñas más con el apoyo de una Fundación que las escuchó les puso abogado e interpusieron una querella. Después vino la pandemia y nos fuimos atrasando porque se presentaban al tribunal los casos de más connotación
¿Cómo afectó a su hija, psicológicamente lo sucedido?
Al principio se quería ir de la casa, porque la mamá la había traicionado al denunciar, que nadie le iba a creer, porque él decía que era Hijo Ilustre, una persona intachable, eso fue haciendo que mi hija se convirtiera en una adolescente más introvertida. Ahora que ella es mamá, no puede dar lactancia, algo que al principio no relacionaba con el abuso. Hubo dos intentos de suicidio, fue muy fuerte; en el momento se culpaba, decía qué hice yo para provocarlo.
¿Hubo algún intento de acercamiento de parte de Pontigo para con ustedes?
No, de parte de él no hubo ningún tipo de acercamiento, solo que al otro día que yo puse la denuncia, le mandó un mensaje de messenger diciéndole «por qué me estas haciendo esto». Siempre nos hemos preguntado como se enteró tan rápido de la denuncia. Después vino todo el show mediático, haciéndose la víctima y mencionando quien lo había denunciado, mencionando a la víctima, fue lo primero que hizo.
¿Sufrieron algún tipo de presión para desistir de la denuncia?
Claramente sus cercanos y familiares nos amenazaban diciendo que nos iban a golpear, que se venía una tremenda denuncia de vuelta. Fue un hostigamiento social, entonces empezaron a inventar cosas de la familia, de mi hija, que era promiscua, que antes había denunciado a un profesor. Que la mamá estaba loca, que él era un profesor intachable. El andaba libre en la calle y la víctima estaba encerrada en su casa.
¿Se siente satisfecha con este veredicto de culpabilidad?
No estoy satisfecha, pero si estoy tranquila conmigo misma, como mamá, como mujer, como amiga. No estoy satisfecha porque se desestimaron dos causas de dos víctimas a la que revictimizaron al tener que contar los hechos y no les creyeron. Bueno, en su momento a nosotras nadie nos creyó; pero yo les creo, esperemos a que la sentencia este lunes 23 sea la más correcta y que se haga justicia, que pague con pena de cárcel y no descartamos una denuncia en la Corte de Apelaciones para que el caso de las otras niñas, que no tuvieron justicia, puedan tenerla para mitigar un poco ese dolor tan grande que significa un abuso, una violación, se transgrede en tu moralidad, en tu interno como mujer. En ese momento cuando se abusa de una persona sexualmente inmediatamente matas a esa persona, esa persona sobrevive con ese dolor. Es una situación que creo que ninguna persona debiera sufrir; esperamos que tenga pena de cárcel, es lo mínimo para contribuir a sanar y mitigar el dolor.
¿Algo que quiera agregar?
Aclarar que son cuatro víctimas, al principio eran tres, cuando una de ellas iba a testificar, por unanimidad los magistrados deciden que ella pasa a ser víctima y el tribunal adjunta una querella frente a la denuncia y la querella que ya había. Las niñas tenían 16, 17 y 15 años, cuando sucedió. Hoy ellas ya son mujeres, profesionales, con carreras de ayuda hacía niños y la comunidad.
Detalle no menos importante es que él durante 40 años engañó a la comunidad, diciendo que era actor y profesor, que había estudiado en la Escuela de Teatro y la verdad es que no tiene ningún título.

(Alejandro Iglesias)